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Una nueva
aplicación para tabletas, Pictogram, pretende mejorar las capacidades de
estudiantes con trastornos del espectro autista y trastornos comunicativos
graves. La aplicación, aún en fase piloto, permite monitorizar los avances de
cada usuario y archivarlos para contar con un seguimiento temporal de su
actividad.
La aplicación
recoge los resultados del proyecto europeo FIRST (Flexible Interactive
Reading Support Tool), que ha posibilitado desarrollar una plataforma web
europea para permitir a personas con autismo simplificar documentos y así
mejorar su déficit en la comprensión.
El
conocimiento derivado de este estudio ha incidido en las novedades de la aplicación.
Por un lado, facilita el proceso en el que el usuario expresa su mensaje, ya
que se utiliza una gramática que funciona de forma parecida a como lo hace el
cerebro, con carpetas de significado. Es decir, no se muestran al usuario
todos los pictogramas, sino sólo los relativos a aquello a lo que quiere
referirse.
Otra ventaja
es la personalización del vocabulario, de forma que cada usuario contará en
su galería con aquellas palabras que utilice de forma frecuente y no otras.
Pictogram también permite que tutores, padres, terapeutas y profesores se
comuniquen con el niño del mismo modo que él se comunica con ellos.
La aplicación
permite monitorizar la evaluación del proceso de adquisición del lenguaje al
integrar un sistema de evaluación y creación de ejercicios, ya que todas las
acciones del niño en la tableta pueden ser seguidas por el terapeuta en
tiempo real en su escritorio del ordenador. Éste puede modificar el
vocabulario que está manejando y hacer un seguimiento de cómo reacciona el
alumno, el tiempo que emplea en hacer los tests o sus aciertos.
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